Al final, y al principio... todo viaje es una aventura. Lo es desde el momento que empiezas a prepararlo, lo es durante la ruta (de eso tratan los grandes viajes) y lo es después que finaliza, con el poso que ha dejado la experiencia, las amistades, los nuevos ritmos... los descubrimientos que se han hecho. Cada viaje añade algo nuevo a la vida... y una suma de viajes...
Marruecos siempre es un gran destino, lo es para mi, que lo visité por primera vez hace unos 17 años... Su exotismo, la amabilidad de su gente, sus colores y aromas... su arquitectura e historia... el enigmático desierto y la belleza de sus ciudades imperiales.
En esta ocasión, la propuesta de una semana venía acompañada de la colaboración de Anayoga, una mujer presta siempre a escuchar nuevas ideas y abrirse a nuevas posibilidades; desde ahí todo lo maravilloso es posible, y es lo que ocurrió durante este viaje, una sucesión de historias bonitas con mujeres bonitas de verdad.
Del 29 de octubre al 5 de noviembre, nos embarcamos en esa aventura cuyo eje central esta vez era el Yoga, el físico pero también el emocional, el vital, como todo buen yoga. Y en ello Ana es una gran maestra; con ella aprendimos, compartimos, descubrimos y reímos... también lloramos... de alegría, de emociones retenidas, de comprensión, de amor.
Essaouira y la preciosa Villa Tassourt, nos acogieron con los brazos abiertos durante varios días. Disfrutamos enormemente. Luego el desierto de Agafay y esos "ángeles" que a veces aparecen en el camino y nos hacen el trayecto y la estancia más agradable y fácil. Una visita a un lejano pueblo del Atlas donde nos encontramos con Saida y su gente, que recientemente habían sufrido de cerca las consecuencias del fuerte terremoto en el país... y finalmente unos bellos días de la Medina de Marrakech donde nos dejamos llevar por el bullicio, las compras, la buena comida y los rincones con encanto...
Una propuesta completa, bien argumentada, bien acompañada y bien disfrutada.
Yoga, meditación, bienestar, cuidado corporal, naturaleza, tiempo libre, gente hermosa... y agradecimiento. Mucho agradecimiento.
Seguimos hacia el siguiente destino.
Eres bienvenida/o.